La Biblia usa la palabra “cristiano” un total de tres veces para describir a los seguidores de Jesús. Pero hay otro identificador que llena las páginas del Nuevo Testamento, una palabra que erróneamente reservamos para la élite que usa halo y pierde algo profundo en el proceso: “santos”.
Los santos no son personas que viven fuera de las luchas de la vida. Convertirse en santo es sentir lo que Dios siente por este mundo y alinear nuestras acciones con su corazón. Es abrazar la naturaleza de Dios y poseer una esperanza y una confianza en su promesa para hacer todas las cosas nuevas
Dentro de esta antigua palabra hay una invitación divina para descubrir quién Dios te creó para ser y despertar a la vida que debes conocer. Con la base de las Escrituras y las historias de su propia experiencia, Addison Bevere presenta un argumento convincente de que la vida que deseas se encuentra en el misterio de esta identidad sagrada. Si quieres cambiar la religión sin vida por la maravilla de seguir a Jesús, este libro te impulsará en tu viaje.
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